Un recorrido por su historia, su modelo de suscripción y el funcionamiento de su algoritmo. Las particularidades de la plataforma que logró concentrar la escucha de audio. Por Florencia Sosa

La era del streaming
El streaming puede ser definido como la distribución digital de archivos multimedia a través de la difusión continua por una red informática. El usuario recibe y reproduce audio y/o video al mismo tiempo en que estos son distribuidos por un proveedor, sin necesidad de completar la descarga.
¿Cuáles son las principales ventajas del streaming online?
- Acceso ilimitado a la biblioteca musical desde cualquier lugar, en cualquier momento y desde cualquier dispositivo conectado a Internet.
- Liberación de espacio al no tener que descargar al dispositivo que se está reproduciendo.
- El precio de la suscripción mensual es relativamente bajo para la mayoría de los servicios de streaming.
- Opción y creación de playlists para compartir con otras personas.
De esta manera, con una simple búsqueda el consumidor puede estar escuchando cualquier canción que desee, donde quiera, de una manera simple y sin tener que descargarla en su dispositivo. Esta funcionalidad cambia rotundamente la experiencia de los usuarios ya que en el pasado para acceder a la música se debía adquirir el disco, cassette o CD para poder escuchar en su dispositivo.
Las plataformas de streaming también cuentan con funcionalidades para mejorar la experiencia de los usuarios: la posibilidad de compilar sus propias playlists basadas en sus artistas y géneros preferidos; los sistemas de recomendación basados en algoritmos de acuerdo con el perfil de cada usuario; la posibilidad de compartir listas, artistas o canciones con otros usuarios y la posibilidad de reproducción offline.
Pero los beneficios no son únicamente para los usuarios, los artistas y las compañías dueñas de derechos musicales encontraron otra forma de sumar ingresos por la reproducción de sus obras.
Las tres principales plataformas que brindan servicios de streaming a nivel mundial son: Spotify, Apple Music y Amazon Music. Apple es una de las compañías más grandes del mundo, fue fundada en la década de 1970 como una empresa fabricante de computadoras, actualmente es líder en la creación de tecnologías de la información y de la comunicación. Amazon es una multinacional que desde sus orígenes fue fundada como un portal de ventas de libros online, pero diversificó su oferta con diferentes servicios. Cabe señalar que la plataforma líder de escucha de música con más usuarios es Youtube, con mil quinientos millones de usuarios activos, pero únicamente funciona bajo el modelo de publicidad.
Por su formato, el streaming se ve atravesado por regulaciones de orden económico (acuerda y fija sus precios, genera una oferta en base a la identificación de una demanda); la regulación por usos y costumbres (se trata de nuevos dispositivos de reproducción de música adoptados por las audiencias); la regulación de código y arquitectura (el streaming funciona bajo la estructura de internet, hace uso de algoritmos y de dispositivos electrónicos) y la regulación legal – normativa que está relacionada a los derechos de autor y pago de regalías a artistas y discográficas que proveen las canciones.
Tipos de servicios
Las empresas que brindan el servicio de streaming han probado con diversas alternativas para monetizar sus modelos de negocio. Las que mayor éxito tuvieron y mantienen en la actualidad la mayoría de las compañías son:
- Freemium: Ad Free Services (Gratis con avisos publicitarios).
- Premium: Subscription (Suscripción mensual).
El modelo “freemium” es brindado por las empresas con la expectativa de que algunos de estos usuarios luego decidan convertirse en un usuario “premium”. En la industria de la música, si bien el modelo gratuito genera ingresos a las empresas por parte de las publicidades, este no es suficiente para cubrir los costos operativos y regalías a los derechos de autor. Por lo tanto, la conversión de los usuarios “free” al modelo “premium” es un indicador clave para alcanzar la rentabilidad.
En el modelo premium (o por suscripción), las compañías cobran una tarifa periódica (generalmente mensual o anual) a sus usuarios. Con su suscripción, los consumidores pueden acceder a ciertas funcionalidades como no tener publicidades, una mejor calidad de sonido y la posibilidad de acceder de manera offline. Es importante para las empresas identificar por qué un consumidor estaría dispuesto a pagar una tarifa mensual. La estrategia de las empresas es acotar sus servicios “gratuitos” para que el usuario tenga la voluntad de comenzar a pagar por otras funcionalidades.
Nacimiento de Spotify
Spotify fue fundada en 2006 en Estocolmo, Suecia por Daniel Ek y Martin Lorentzon. En los comienzos solamente se podía acceder a la opción free mediante una invitación de otro usuario. Se lanzó oficialmente el 7 de octubre de 2008 al acordar licencias con las grandes compañías discográficas tras dos años en versión de prueba. Ese mismo año se habilitó la opción de suscripción (servicio de pago) y las cuentas gratuitas limitadas por invitación fueron extendidas gradualmente llegando en 2009 a Reino Unido.
Recién en 2011 cuando ya contaba con 10 millones de usuarios en Europa decidió desembarcar en Estados Unidos. Como primera medida de expansión en EEUU, decidieron brindar una suscripción gratis por 6 meses a todos los usuarios, que luego de este periodo podían elegir si optar por el modelo de suscripción o freemium. La estrategia le dio resultado, y para el año 2013, la compañía ya contaba con un millón de usuarios bajo el modelo de suscripción en EEUU y seis millones en el resto del mundo.
Desde sus comienzos, la empresa tuvo una estrategia de “expansión agresiva” para lograr escalar el negocio y conseguir volumen de usuarios e ingresos. En la actualidad, el servicio se encuentra activo en 79 países y la empresa cuenta con oficinas en todo el mundo. La oficina central se encuentra en Estocolmo, Suecia.
Características de Spotify
Spotify es un servicio en streaming de música, en esta plataforma se carga un archivo de música en la caché para que pueda reproducirse directamente desde la aplicación. Con la versión gratuita, el usuario tiene que escuchar anuncios regulares, cada media hora, pero se puede obtener una cuenta de pago “premium” para mejorar la experiencia.
Una misma cuenta puede ser utilizada en varios dispositivos: ordenadores, teléfonos, tabletas, altavoces, televisores o coches, con la posibilidad de pasar fácilmente de uno a otro con Spotify Connect.
Los usuarios pueden utilizar varias funciones para encontrar y escuchar su música favorita. Se pueden seleccionar varios sellos discográficos, las listas de reproducción son programables o se pueden utilizar recomendaciones y descubrimientos. También hay emisoras de radio disponibles, y Spotify ofrece su propia función de radio, en la que las canciones más populares se reproducen automáticamente y orientadas al usuario en una lista de reproducción.
En redes sociales Spotify se presenta como la plataforma que es capaz de concentrar todo el mercado del audio: «Música + Podcast + Audio = Todo en el mismo lugar». Los usuarios de Spotify pueden recomendar o compartir sus títulos vía Facebook, Instagram, Twitter, Blog o a través de canales de mensajería privados.
Propuestas de suscripción a usuarios
Además de su servicio gratuito, Spotify ofrece cuatro planes premium que según la tarifa habilita nuevas funcionalidades de consumo:
Individual: que incluye una cuenta con un costo mensual de 9,99 €, esto posibilita la escucha sin anuncios y sin necesidad de conexión a internet.
Duo: que incluye dos cuentas por el costo mensual de 12,99 € . Ofrece música sin anuncios, sin conexión y a la carta. Las cuentas deben registrarse bajo una misma dirección (ubicación geográfica). Al vincularse las dos cuentas comparten una lista de música que reúne los dos gustos musicales.
Familiar: incluye seis cuentas por el costo mensual de 15,99 €. Ofrece música sin anuncios, sin conexión y a la carta. Las seis cuentas deben registrarse bajo una misma dirección (ubicación geográfica). Con el pack familiar todos los integrantes pueden escuchar la música propuesta por las demás cuentas.
Estudiantes: una cuenta por el costo mensual de 4,99 €. Es exclusivo para estudiantes de educación superior que estén acreditados por la plataforma. Ofrece música sin anuncios, sin conexión y a la carta. Para participar de esta oferta (descuento del 50%) Spotify requiere a los estudiantes su nombre, el nombre de la institución educativa, una dirección de correo electrónico, la fecha de nacimiento.
El algoritmo de Spotify
Los algoritmos son los conjuntos de reglas que tienen por finalidad ordenar y procesar datos de una manera automatizada. En este aspecto, el algoritmo de Spotify tiene en cuenta las características de lo que escuchan, comparten, guardan y hasta desechan las personas en relación a sus playlists.
Spotify tiene tres mecanismos para realizar las recomendaciones:
- El primero se denomina “modelos de filtrado colaborativo”, se centra en el análisis de su comportamiento y el de los demás.
- El segundo “modelos de procesamiento de lenguaje natural”, se basa en el análisis de texto.
- El tercero, “modelos de audio sin procesar”, se fundamenta en el análisis de las pistas de audio en bruto.
La plataforma cuenta con un departamento llamado Misión de Datos, en el que hay psicólogos sociales, físicos de partículas y neurocientíficos computacionales, y cuya labor es psicoanalizar a los usuarios a partir de su uso de la plataforma. Luego, venden esa información a anunciantes, para las empresas conocer los estilos y cantantes más escuchados es una buena forma de acercarse a sus potenciales clientes.
Spotify procesa alrededor de 600 GB de datos diarios. La compañía tiene unos 28 Petabytes de datos distribuidos en cuatro centros de datos. Gracias a esto pueden ofrecer, entre otras cosas, recomendaciones semanales a sus usuarios.
Hay dos playlist que funcionan con el algoritmo de Spotify, una de ellas es “Descubrimiento semanal” o Discover Weekly, formado por “30 canciones que no has escuchado con anterioridad, pero que seguramente te van a gustar”. Este se construye en base al historial de reproducción previa.
Mientras que, en “Radar de novedades” o Release Radar, se recomiendan “todos los lanzamientos recientes que hayan realizado tus artistas favoritos”, y se genera de manera automática todos los viernes de cada semana, dependiendo de los artistas a los que los usuarios siguen y escuchan de manera habitual.
Definitivamente el desarrollo de su algoritmo es una de las claves del éxito de Spotify, ya que da cuenta de su comprensión respecto a las formas de consumo de sus audiencias. El algoritmo se perfecciona con el pasar del tiempo priorizando las necesidades de los usuarios. El modelo de negocio de Spotify se basa en publicidad y en suscripciones directas. Las experiencias de los usuarios mejoran cuando pasan a premiu, donde el pago por el servicio exime de la escucha de publicidad cada media hora.